La calle 10 de junio, una de las que soporta mayor tránsito de vehículos del municipio, al ser una de las arterias que comunica el centro con la zona sur, ha sido completamente asfaltada debido al mal estado que presentaba este vial. Además del asfalto, también se han instalado diversas bandas reductoras de velocidad -badenes- para mejorar la seguridad de los peatones.

Esta intervención viene a completar las actuaciones que se están desarrollando en el acondicionamiento de vías en casco urbano, como la restauración de la calle Granados, actualmente en ejecución. Estas mejoras suponen una inversión superior a los 380.000 euros.

La alcaldesa de Torredelcampo ha asegurado que “era una intervención necesaria ya que se trata de una de las calles que además de ser el acceso al aparcamiento público del 10 de junio, es el enlace más directo con la zona sur de la localidad. Con esta intervención también incidimos en la mejora de la seguridad vial para los peatones”.