Como cada año, coincidiendo con la celebración de la festividad de los Santos y Difuntos, miles de ciudadanas y ciudadanos se acercarán hasta el Cementerio Municipal para arreglar las tumbas de sus familiares y amigos. Previamente a la celebración de la festividad, los operarios municipales acondicionan las infraestructuras generales del camposanto; reparaciones, limpieza, arreglo de  jardines y pintura en general.

Además de estas labores de mantenimiento, el Ayuntamiento mejora cada año estas instalaciones; concretamente, este año se han construido dos nuevos módulos de nichos, se ha pavimentado la calle central de la zona de ampliación,  se ha reforzado el muro de separación del antiguo camposanto y se han restaurado el alcorque del camino del cementerio. Unas actuaciones que han supuesto una inversión de más de 130.000 euros.

La actuación de mayor entidad ha sido la construcción de los dos nuevos módulos de nichos prefabricados y terminados con revestimiento de ladrillo artesanal que han dotado esta instalación de 196 nuevos nichos. El proyecto ha supuesto una inversión de 88.500 euros, y se ha llevado a cabo a través del programa PFEA.

Otra de las actuaciones destacadas ha sido la pavimentación con hormigón impreso de la calle central del nuevo cementerio, en la que además, se han plantado árboles y colocado bancos. Igualmente necesaria era la restauración y el reforzamiento del muro de separación de las antiguas instalaciones.

Actuaciones todas ellas, que complementan las prestaciones y servicios de este espacio sentimental de la población torrecampeña, ya que en los últimos años el cementerio se ha ampliado en más de 16.000 metros cuadrados y se ha dotado de un tanatorio con unas magníficas instalaciones.

Si como hay quien dice que “el carácter y personalidad de un pueblo se puede intuir por como trata a sus difuntos”, Torredelcampo, es evidente que pone todo su empeño para que las instalaciones de su camposanto sean dignas y dotadas de unos servicios adecuados.