El martes, 12 de septiembre, el artista torrecampeño, Manuel Luis Armenteros inaugura la exposición “El dolor de los otros”, a las 12:00 horas, en el Museo Provincial de Jaén. En ella, Armenteros presenta sus últimas creaciones artísticas, integradas en el proyecto “ UT PICTURA POESIS” que inició en 2003. La muestra se exhibirá hasta el 15 de octubre.

EL DOLOR DE LOS OTROS

Manuel Luis Armenteros

En el año 2003 inicié el proyecto UT PICTURA POESIS con una exposición en la Universidad de Jaén que ahora se continúa con esta muestra, de entonces cabe recordar dos ideas sobre las que fundamenté este proyecto:

La primera habla de la configuración de dos modelos de entender la pintura, una la que nos ocupa, donde el modelo queda trascendido por el simbolismo de las formas y otro que crea la necesidad de la ilusión y donde la pintura acaba en lo representado.

La segunda me la acercó un texto de Francisco Baena donde se atendía de la misma manera a la pintura y poesía, que al contrario de otras narrativas no tienen principio ni final. No hay un momento primero.

La ausencia de límites, impone en la pintura la participación no solo del espacio que la acoge, sino también del tránsito (del espectador) Esta idea de tránsito no acaba en el hecho físico que supone al espectador situarse y deambular (su presencia), si atendemos a Jesús González Requena “El sentido del texto no es lo que dice (…) es el sentido – la necesidad- que para un sujeto tiene escribirlo y para otro sujeto tiene leerlo”

Este tránsito entre el que pinta y el que observa es el que dota de sentido al hecho pictórico. Se ha dicho que la pintura es el juego que se produce entre los ojos, juego de miradas. El deseo o curiosidad que nos lleva a mirar y no encontrar nada conocido puede acabar en el que mira en desasosiego. En la huida de la pintura para no acabar en lo representado se determina la paradoja del símbolo que en su presencia oculta su significado: “Nunca puede quedar definitivamente explicado sino que exige ser descifrado de nuevo” en palabras de José Ángel Valente.

CARNAGIONE (piel, tez) El recorrido comienza en la sala 1 con cuatro instalaciones pictóricas, cada una de ellas con diferentes número de obras y medidas.

Las obras se presentan mediante la fragmentación y acumulación con ausencia de referencias gráficas y figurativas. Este interés por los fondos (y los también llamados lejos) llevaron a la pintura barroca a la conquista de la profundidad y la creación de un espacio continuo donde la obra invade el lugar del espectador.

Las obras se presentan mediante la fragmentación y acumulación con ausencia de referencias gráficas y figurativas. Este interés por los fondos (y los también llamados lejos) llevaron a la pintura barroca a la conquista de la profundidad y la creación de un espacio continuo donde la obra invade el lugar del espectador.